Mantener la actividad nunca fue tan complicado hasta que llegó marzo de 2020. La crisis vivida con el impacto de la pandemia del Covid-19 ha obligado a las empresas a adaptar su entorno laboral facilitando el teletrabajo, pero hay muchas compañías e instituciones que empiezan a reanudar su actividad paulatinamente con el reto de tener que garantizar la salud de toda su plantilla pero también la de los clientes.

La desescalada hacia el desconfinamiento será por fases, ante una economía que ya arroja resultados negativos. Los datos del Banco de España avanzan bajadas del PIB del 13,6%, donde sobrepasaremos tasas de desempleo del 20 por ciento, mucho peor que en la crisis de 2012, pero sobre todo arrojan también que hasta que no haya vacuna fiable,  la salida y la reactivación económica no será ni fácil, ni rápida. Por ello, las empresas deben prepararse para la vuelta de la actividad instaurando medidas que eviten el contagio y frenen la propagación del virus con el único fin de poder seguir dando continuidad a sus negocios. En este escenario convulso, la tecnología se convierte en un aliado respetando los derechos de los ciudadanos al tratamiento de los datos, pero pudiendo controlar que el tránsito que se genere en los distintos espacios de trabajo no repercuta en la salud de terceros.

Las empresas pueden recabar sin problema información sobre el estado de salud de empleados y clientes

La Agencia de Protección de datos ha sido clara en este punto al publicar las medidas que deben adoptar las compañías, facultando a toda empresa a recabar información si un empleado está infectado o no por el virus Covid-19, con el fin de poder diseñar un plan de prevención de contagio y frenar la propagación del virus en la plantilla, pudiendo solicitar también información de los visitantes externos sobre la existencia de síntomas.

Así será habitual a la vez que necesario para que no haya un repunte de la pandemia, contar en aquellos espacios donde haya un alto volumen de entrada de personas, como en tiendas, grandes compañías, instituciones, centros educativos… controles de acceso y medición de temperatura con objeto de verificar el estado de salud de las personas y evitar peligros.

Medida contemplada ya en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y que resulta obligatoria tanto para el empleador como para el trabajador, donde los datos que se recaben, eso sí, deben respetar la normativa de protección de datos obedeciendo a la finalidad específica, en este caso, de contener la propagación del virus.

Nuestro módulo de reconocimiento facial y control de temperatura está precisamente pensado para la seguridad y protección de las personas en sitios públicos como hospitales, clínicas y distintos entornos con tránsito habitual.

El dispositivo, de fácil instalación y uso sencillo, emplea un termómetro infrarrojo que facilita la medición sin contacto permitiendo o denegando el acceso. Cuenta además con una memoria de hasta 30.000 rostros, adoptando varias formas de instalación.

Por tanto cualquier empresa está habilitada para conocer la existencia de personas afectadas, pudiendo solicitar información también a sus visitantes externos SIN el consentimiento explícito para ello. No obstante la ley también indica que a fin de proteger los derechos y libertades de las personas físicas “ese tratamiento de datos elativos a la salud por razones de interés público no debe lugar a que terceros, como empresarios, compañías de seguros o entidades bancarias, traten los datos personales con otros fines”.

Medidas de la OMS frente al Covid-19 a tener en cuenta

En cualquier caso la OMS ha hecho públicas una serie de medidas de prevención y de contención que conviene tener en cuenta en el inicio de actividad:

  • Refuerzo en la limpieza de oficinas con productos como alcohol, jabón o gel antibacterial. Los dosificadores desinfectantes deben estar en lugares visibles
  • Promover el lavado de manos continuo y limpiar los objetos con los que se tienen contacto como las computadoras facilitando a los empleados y también a los clientes las medidas de higiene adecuadas.
  • Implantar medidas respiratorias adecuadas garantizando la disponibilidad de mascarillas o pañueños de papel en lugares de trabajo para aquellos que tosan junto con cubos de basura con tapa para deshacerse higiénicamente de ellos.
  • Establecer turnos de trabajo, facilitando el teletrabajo y evitando aglomeraciones y restringiendo las visitas en la medida que sea posible.
  • La atención al cliente puede realizarse a través a través de videollamada, consulta telefónica o chat web, soportes que contribuyen al distanciamiento físico.
  • Si algún trabajador está afectado por la pandemia debe realizar la cuarentena domiciliaria e informar de forma inmediata a los servicios de salud, debiendo informar a la empresa, debiendo todo el equipo de trabajo de la persona infectada realizar aislamiento preventivo en casa e informar si presenta cualquier síntoma del virus: fiebre, dolor de cabeza, dificultad respiratoria…

Se trata de que las compañías no bajen la alerta para evitar brotes. Recuerda que la toma de precauciones simples y la planificación adecuada pueden marcar una gran diferencia. Las medidas que adoptes ayudarán a proteger a tus empleados y clientes, a la vez que mantienes la continuidad de tu actividad, lo que más te importa. #QUENADATEPARE